Horizonte de Sucesos - 35mm

 

OJO IZQUIERDO:

La imagen genera incomodidad, extrañamiento. Este rango de sensaciones se apoyan en lo sombrío y lo tétrico, la mujer te interpela directamente con la mirada y su postura refleja una seguridad y determinación completamente intimidante, la rigidez y lo estático de la imagen parece contradecirse con la impresión de movimiento que tiene el personaje, donde aparenta caminar hacia el frente, hacia la cámara y el espectador, que despierta miedo o ganas de correrse de ahí.


OJO DERECHO: 

Habitación antigua con una cama que reposa en un respaldo de terciopelo verde, un acolchado blanco, con bordados floreados: rojos, amarillos y verdes en el centro. En las paredes de la cama y de al lado de la puerta negra principal, se encuentra centrado un cuadro de marco dorado y un lienzo de flores. Delante de una puerta blanca semiabierta y entre la cama y la puerta negra, se recorta la figura de una mujer de tez pálida y pelo platinado, vestida de un traje gris que se realza cían por una luz del mismo color, una polera blanca se ve impoluta, al igual que su piel, por una luz blanca que se refleja perpendicular a ella. Sobre la cama y la pared se imprimen dos sombras de la misma figura, una más dura y la otra desfasada de esta misma pero más tenue. El piso de alfombra gris, cubre toda la habitación excepto el interior de la puerta blanca, ahí choca con un cerámico claro. Sobre el costado izquierdo de la cama, se ve un velador de pantalla opaca y color magenta, dos tenues luces magentas enmarcan cada costado de la habitación y se apoyan en las luces circulares del centro, cían y blanca. Las esquinas de la habitación se funden en sombra casi a negro.

TERCER OJO:

La habitación perfectamente armada no pertenece al personaje y nos lleva directo a una habitación de hotel, remontando a un lugar de paso. Pareciera la transición después de un momento, y antes de otro, cuál es la acción que aconteció? Misterio. Tiene que ver con algo lúgubre? con un asesinato? con un deber? la mujer está confiada, eso denota. Sabe muy bien lo que hizo o lo que va a hacer. Su ropa impecable y su aparente salida del baño nos cuenta una acción, un cambio, se acicaló? se cambió de ropa? Por qué? Aunque ella está completamente determinada, muy lejos está de encontrarse relajada. Su lenguaje corporal, completamente tieso, sus manos cerradas en puño y su mirada clavada en el frente, acompañada del movimiento pausado de la caminata hacia delante, nos cuenta sobre lo que viene o va a hacer, parece ser algo que es habitual en ella, por eso su confianza, pero que no deja de perturbarle o generarle sensaciones encontradas, en cierto punto. Completamente sombría, la imagen nos despierta un contexto del mundo más under, de una época anterior a la contemporánea, de asesinos a sueldo.

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